Hace unas semanas acudí a una sesión de tantra. He de reconocer que todas esas terapias alternativas, energías interestelares o terceros y cuartos ojos, me son absolutamente indiferentes. La combinación de un completo gilipollas y un absoluto escéptico me hace impermeable a todo cuanto huela a incienso y buen rollito. Pero resulta que un conocido me dijo que por 60 euros una hermosa mujer había estado mas de 90 minutos masajeandole y al final le había proporcionado un final feliz digno del capitulo 100 de Bricomania. Así que ahorre durante el siguiente año y me planté en el piso de la susodicha con mis mejores billetes y la ropa interior recién planchada (ojalá me hubiese dado tiempo de lavarla también).
La “facilitadora” (así se hacía llamar) era una atractiva muchacha de poco mas de 30 años, delgada y vestida como si acabase de salir disparada de la maquina del tiempo desde Ibiza en los 60. Olía a marihuana y sal.
-Hablemos un poco antes -dijo ella mientras cogía mis 60 euros y me invitaba a tomar asiento en el suelo- ¿Cómo te sientes?
Me sentía excitado y a punto de lanzarme a hundir mi cara entre sus pechos.
-Bien -respondí apretando los muslos.
-¿A que has venido exactamente?
¿A que narices creía que había venido? Estábamos en una pequeña habitación con una camilla, ella estaba vestida con vaporosas ropas que dejaban ver hasta la marca de su ropa interior y le acababa de pagar 60 euros. No había venido a hacer ceniceros de barro, eso no, desde luego.
-No lo se.
Cuando no se que decir siempre digo “No lo se”. Una mentira a medias es como una verdad a medias. Me gustan las mujeres con medias. Aquella mujer llevaba calcetines de colores.
-Quítate la ropa y túmbate en la camilla.
Por fin. Ahora nos entendíamos. La obedecí y me tumbé en la camilla que crujió bajo el peso de mis escasos 182 kilos (la operación bikini 2010 obra milagros en mi). Entonces ella comenzó a rociar mi cuerpo con aceite y comenzó a masajearme lentamente, comenzando por la espalda. Un comienzo es un comienzo, vaya. Solo debía tener paciencia. Al cabo de media hora me pidió que me diese la vuelta, lo hice mostrando una mas que impresionante erección de mi mcropene que rápidamente hizo bajar dándole unas cuantas bofetadas con fuerza. ¿Aquella hippie acababa de abofetear mi micropene? Sus manos se posaron en la cima de mi abultada barriga.
-Siente la respiración en el estomago. ¿La sientes?
Lo único que sentía era su respiración en mi cara y un dolor de huevos mas que considerable.
-Claro que la siento.
Su mano comenzó a deslizarse lentamente hacia el sur pero justo cuando tenía que pasar por encima de mis genitales hizo un rápido movimiento esquivándolos y acabado entre mis piernas. Uno de sus dedos comenzó a presionarme en ese desconocido lugar que hay entre los testículos y el ano.
-¿Sientes el último chakra?
Lo único que sentía era su dedo demasiado cerca del túnel prohibido.
-¿No serás usted familiar de un camionero de Soria? -pregunté justo cuando una de sus manos presionaba esa delicada parte y la otra presionaba mi cabeza.
-¿Sabes donde está el perineo? -preguntó ella.
-Yo no tengo de eso.
-Lo estoy presionando.
-¿En la cabeza?
-Con la otra mano, gilipollas.
Así pues aquella parte que me estaba presionando y que me acompañaba desde que era gilipollas se llamaba perineo. Pues que dejase de presionarme el perineo y se dedicase a maniobrar con el mástil del amor porque me estaba poniendo nervioso. Cerré los ojos y me dejé llevar aunque no demasiado, había comido garbanzos y dudo que el incienso pudiese disimular lo que se estaba acumulando bajo sus manos.
Entonces sucedió el milagro, una de sus manos pasó por encima de mi micropene. Erección, una nueva bofetada, más dolor de huevos. ¿Que diablos estaba sucediendo?
-Intenta controlar tu deseo, el sexo ahoga todos tus instintos.
Ella tenía razón pero yo seguía sin entender cual era el problema. ¿Tanto le costaba agitar un poco la coctelera?
-El tantra no es sexo -dijo ella.
Después de una hora, de tocarme por todos lados y de cobrarme 60 euros resultaba que el tantra no era sexo. ¿Que era pues? Me imaginaba volviendo a casa con una erección de caballo, un cenicero de barro y 60 euros menos. ¿Cómo acabó aquella visita? Con diez agujas de acupuntura en la cabeza, una erección de caballo y 60 euros menos. La próxima vez entro en el chino y me compro un cenicero de esos con mujeres desnudas grabadas en el fondo. Se lo juro a todos ustedes.
¡Ah, lo olvidaba! Y para mi que todo ese incienso es para poder relajar el cuarto ojo y dejar escapar flatulencias sin efectos colaterales: o sea, para disimular el olor a pedo. Tanto tantra y tantas ostias... a mi no vuelven a pillarme.
La “facilitadora” (así se hacía llamar) era una atractiva muchacha de poco mas de 30 años, delgada y vestida como si acabase de salir disparada de la maquina del tiempo desde Ibiza en los 60. Olía a marihuana y sal.
-Hablemos un poco antes -dijo ella mientras cogía mis 60 euros y me invitaba a tomar asiento en el suelo- ¿Cómo te sientes?
Me sentía excitado y a punto de lanzarme a hundir mi cara entre sus pechos.
-Bien -respondí apretando los muslos.
-¿A que has venido exactamente?
¿A que narices creía que había venido? Estábamos en una pequeña habitación con una camilla, ella estaba vestida con vaporosas ropas que dejaban ver hasta la marca de su ropa interior y le acababa de pagar 60 euros. No había venido a hacer ceniceros de barro, eso no, desde luego.
-No lo se.
Cuando no se que decir siempre digo “No lo se”. Una mentira a medias es como una verdad a medias. Me gustan las mujeres con medias. Aquella mujer llevaba calcetines de colores.
-Quítate la ropa y túmbate en la camilla.
Por fin. Ahora nos entendíamos. La obedecí y me tumbé en la camilla que crujió bajo el peso de mis escasos 182 kilos (la operación bikini 2010 obra milagros en mi). Entonces ella comenzó a rociar mi cuerpo con aceite y comenzó a masajearme lentamente, comenzando por la espalda. Un comienzo es un comienzo, vaya. Solo debía tener paciencia. Al cabo de media hora me pidió que me diese la vuelta, lo hice mostrando una mas que impresionante erección de mi mcropene que rápidamente hizo bajar dándole unas cuantas bofetadas con fuerza. ¿Aquella hippie acababa de abofetear mi micropene? Sus manos se posaron en la cima de mi abultada barriga.
-Siente la respiración en el estomago. ¿La sientes?
Lo único que sentía era su respiración en mi cara y un dolor de huevos mas que considerable.
-Claro que la siento.
Su mano comenzó a deslizarse lentamente hacia el sur pero justo cuando tenía que pasar por encima de mis genitales hizo un rápido movimiento esquivándolos y acabado entre mis piernas. Uno de sus dedos comenzó a presionarme en ese desconocido lugar que hay entre los testículos y el ano.
-¿Sientes el último chakra?
Lo único que sentía era su dedo demasiado cerca del túnel prohibido.
-¿No serás usted familiar de un camionero de Soria? -pregunté justo cuando una de sus manos presionaba esa delicada parte y la otra presionaba mi cabeza.
-¿Sabes donde está el perineo? -preguntó ella.
-Yo no tengo de eso.
-Lo estoy presionando.
-¿En la cabeza?
-Con la otra mano, gilipollas.
Así pues aquella parte que me estaba presionando y que me acompañaba desde que era gilipollas se llamaba perineo. Pues que dejase de presionarme el perineo y se dedicase a maniobrar con el mástil del amor porque me estaba poniendo nervioso. Cerré los ojos y me dejé llevar aunque no demasiado, había comido garbanzos y dudo que el incienso pudiese disimular lo que se estaba acumulando bajo sus manos.
Entonces sucedió el milagro, una de sus manos pasó por encima de mi micropene. Erección, una nueva bofetada, más dolor de huevos. ¿Que diablos estaba sucediendo?
-Intenta controlar tu deseo, el sexo ahoga todos tus instintos.
Ella tenía razón pero yo seguía sin entender cual era el problema. ¿Tanto le costaba agitar un poco la coctelera?
-El tantra no es sexo -dijo ella.
Después de una hora, de tocarme por todos lados y de cobrarme 60 euros resultaba que el tantra no era sexo. ¿Que era pues? Me imaginaba volviendo a casa con una erección de caballo, un cenicero de barro y 60 euros menos. ¿Cómo acabó aquella visita? Con diez agujas de acupuntura en la cabeza, una erección de caballo y 60 euros menos. La próxima vez entro en el chino y me compro un cenicero de esos con mujeres desnudas grabadas en el fondo. Se lo juro a todos ustedes.
¡Ah, lo olvidaba! Y para mi que todo ese incienso es para poder relajar el cuarto ojo y dejar escapar flatulencias sin efectos colaterales: o sea, para disimular el olor a pedo. Tanto tantra y tantas ostias... a mi no vuelven a pillarme.
jajajajaja
ResponderEliminarToda una experiencia!,
Me da pena por usted, me imagino lo ilusionado que iba, después de estar ahorrando un año entero, a lo mejor cambiaron de manicurista!
a todas estas, y que paso con su amigo????
Saludos y abrazos con incienso!
(sin flatulencias)
;D
la proxima se viene a bailar unos tangos a bs as.
ResponderEliminarPero estimado Sr.Gili, ¿acaso ha llegado usted al capítulo 100 de Bricomanía?
ResponderEliminarCómo lamento que no le diera el cenicero, pero perdone que le pregunte, ¿alcanzó a ver la marca de incienso capaz de semenjante proeza?
Es usted un iluso. ¿Agujas de acupuntura? ¿Por qué se dejó hacer eso? ¿Acaso es masoquista?
ResponderEliminarDesde luego yo me parto contigo xDDDDD ¡¡¡
ResponderEliminarDe los errores se aprende, a la proxima el cenicero¡
enserio te consideras un completogilipollas? jaja aunque el primer paso es aceptarlo! mola mucho la entrada,pero que decepcion no?a la próxima al puticlub!
ResponderEliminarQueridos/as todos, gracias por sus comentarios que me hacen sentir el mas gilipollas de todos. Por fin voy camino de destacar en algo, mi madre estará orgullosa.
ResponderEliminarEso si encuentro a mi madre...
Siempre suyo
Un completo gilipollas
nada nada ...estimadisimo gilipollas...le invito a unas cervezas para olvidarlo!!!
ResponderEliminarun beso!
Mi querida Mónica. Acepto esas cervezas. ¿Dónde dice que me va a emborrachar? Recuerde que vivo en la soleada Barcelona, una ciudad donde todas las mujeres van vestidas como si estuviesen en la playa y ninguna me dirije la palabra.
ResponderEliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Me parto la caja. Si es que lo que no te pase a tí... tantra ni tantro. Una puta tradicional hombre, de las que no defraudan...
ResponderEliminarNo hay derecho.
ResponderEliminarLe aconsejo un club de carretera, creo que es más de su estilo... ;P
ResponderEliminarSaludos.
Creo que la pregunta ¿a qué has venido?, fué la clave Sr. Gili.
ResponderEliminarEse "no lo sé" y viendo su cara...no se lo pensó la mujer...a este gilipollas le apreto el perineo y a cascarla...como dice Jauroles, el proximo dia al club...y
Que haya suerte! que ni aún ahí se sabe con Usted...;D
Besoooos
Si usted no sabe para que va a un lugar donde una señorita le saca sesenta euros. Bueno en fin, creo que la saco barata. Que le apretaron unicamente el periné y que no vino el negro de la habitación contigua a dilatarle el esfinter tantricamente.
ResponderEliminarEn un puticlub hacen lo mismo (y más), por menos dinero, y ahora con la crisis hasta te invitan a una copa!
ResponderEliminarLo de abofetear el mcropene es muy fuerteee. Cómo me he reído!. Ánimo que quien la sigue la consigue, y un poco de culturilla mística no biene mal.
ResponderEliminarme encanta su humor, sr Gili! no había oído nunca lo de agitar la coctelera, y todavía me estoy partiendo!!
ResponderEliminaraunque... no es que yo sea superficial, pero 182 kilos y micropene... :s
pero que místico te nos al vuelto si al final vas a dejar de hacer honor a tu nombre y todo¡¡
ResponderEliminarHa sido una fabulosa sesión de sexo tétrico :-D
ResponderEliminarSalu2
Ha hecho ud.que se me saltaran las lágrimas de reirme, eso no hay derecho.
ResponderEliminarDespués decirle que Ud.no tiene remedio, nació gili y morirá gili, que es eso de pagar 60 euros por esa tontería? No vive ud, en la soleadad BCN? (bueno hoy muy soleadad no está,al menos por donde yo estoy!) Tenía que haberse ido a cualquier playa de Bcn y una de esas chicas chinas que ofrecen masaje, le hubiera dado uno con final feliz y por sólo 15 euros, le hubiera sobrado hasta para comerse una paella en el chiringuito.
Le repito Don Gili a ver si se avispa, que lo veo un poco lento de reflejos.
60 euracos menos y con dolor de huevos. Le iba a recomendar lo mismo que YO (suena raro pero es el del comentario anterior) en la Barceloneta con 15€ y vas resuelto.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el relato. Así que me volveré a pasar por acá de nuevo.
Pero bueno! a lo que ha llegado! Ni primero, ni segundo ni octavo chakra! que agite la coctelera joder!!!!
ResponderEliminarahora que pienso, sería una buena idea, tengo inciensos y buenrollismo, a lo mejor cae algun gilipollas y me deja 60 euracos..
aham...escote, musica hindú...calcetines de colores...mm, aham....si, si, si.
creo que el camionero de Soria le hubiera facilitado las cosas...
ResponderEliminarQuerida Urbanoyhumano, lo que no hay derecho es que usted no quiera matrimonio conmigo. El resto son incidencias sin importancia.
ResponderEliminarQuerida aranfernu, por usted hago regimen y me alargo el pene. El micropene, quería decir.
Querida Yo, claro que vivo en BCN... ¿a que espera para conocerme? Me reconocerá por la bolsa de papel en la cabeza y la lentitud de reflejos.
Querida Jo... conozcamos, seguro que le gusto y se enamora de mi. Y si no siempre podemos fornicar hasta el amanecer.
Querida Veronika, si usted tiene escote, música hindú y calcetines de colores tenemos que encontrarnos... siempre que no pretenda presionar mi cuarto chakra...
Gracias a todos/as por sus amables comentarios, se que mi vida no es el mejor ejemplo de lo mentalmente sano. Pero la culpa no es mía, si todas no me rechazasen seguro que no tendría que acudir a lupanares y a sesiones de masaje tantrico. Soy el daño colateral de un feminismo mal entendido. ¿Quien me adopta? O me invita a una cerveza...
Siempre suyo
Un completo gilipollas
estimado gilipollas!!!! yo resido en la calurosa tenerife..pero weno....le enviaré unas latas por correo!!
ResponderEliminarsaludos
Ainssss, CG! Parece mentira que usted se deje embaucar con estas cosas! La próxima vez, tenga en cuenta que más vale lo malo conocido, hombreee! Con la de amigas meretrices que tiene usted y lo bien que les hubieran venido a ellas esos 60€, hombreporDior!
ResponderEliminar60 eurillos solo da para media sesión de sexo tántrico, y sino que se lo pregunten a Sting. Le dejaron a medias... con la Coixet no le pasaría, seguro!.
ResponderEliminarRelájese, Don Gili, que llegan las vacaciones.
Coincido con muchos al decir que debería de haber ido de putas.
ResponderEliminarUn bico
"Cuando no se que decir siempre digo “No lo se”. Una mentira a medias es como una verdad a medias. Me gustan las mujeres con medias. Aquella mujer llevaba calcetines de colores."
ResponderEliminarSin comentarios! XD
Al final siempre va mejor un cenicero....!
Muy divertido, como siempre sr gilipollas.
Saludos
Lo felicito sinceramente, desde Uruguay, pais sudamericano que se dispone a jugar en Sudafrica... bueno, dejemoslo ahì ese tema. Muy bueno el blog, pero me deja una duda: con respecto al cenicero, usted fuma? o es para regalarselo al camionero de Soria? Si no es asì, entonces ahora si, es un completisimo gilipollas. Lo voy a recomendar; un abrazo desde tierras sudacas. Gustavo.
ResponderEliminarMe encanta su estilo.
ResponderEliminarEn cuanto al masaje, para hacerlo con final feliz, no hace falta tanta parafernalia ni tanto dinero.
Saludos.
En que sitios te metes, gillipollas... A ahorrar, que estamso en crisis!
ResponderEliminarSr. Gilipollas, con 182 kg tendría que haberle cobrado al menos 100 euros! :)
ResponderEliminarUn beso!
Jajajaja muy bien relatado compl. gili pero... es que no sabe que el perineo es una de las zonas erogenas? y suele gustar mucho que toquen esa zona tanto a mujeres como a hombres? Y no sabe que el tantra puede ser muy excitante? (aunque no lo he probado...) pero dicen que se puede llegar al orgasmo con el tantra y sin penetracion (incluso mas intenso que con penetración) ni agitar la coctelera como ud. dice... Yo creo que o ud. no estaba por el asunto o a la mujer le quedaba trabajo por hacer... de todas maneras ¿ha sido una buena experiencia no? o no...??
ResponderEliminarJAJAJAJAJAJAJA
ResponderEliminarDicen que de todas las experiencias se aprende algo :)
me sirve aunque no se parezca a Clooney.
ResponderEliminarAcaso nunca ha oido hablar del sexo tantrico? Si se hubiese aguantado y le hubiese dejado terminar la sesión a la pobre chica aún hubiese tenido algo...
ResponderEliminarSi esque es ud. gilipollas.
Saludos,
Arualiaa
juego de local.
ResponderEliminary si hay que repetir en su entorno prefiero el
Bar Lletraferit, me gustan sus baños.
Quien sabe a lo mejor un día me decido, pero eso si no se le ocurra quitarse la bolsa de la cabeza. Y otra cosa como puede estar Ud.seguro que yo no soy Isabel Coixet? Ah!!!!
ResponderEliminarQué manera de reír. El último chakra jajajajaja no puedo con la vida
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminartantra... bofetadas...
ResponderEliminareso no era sado?
juego de local. Vengase, busquese un baño y yo adhiero. :P
ResponderEliminarVe usted? nunca se acostará sin saber algo nuevo....
ResponderEliminarMe parece una manera un tanto bestia de aprender, pero bueno.. ya sabemos que la originalidad es lo suyo...
Aunque ir por ahí dejando que le toquen a uno el 4º chakra.... me parece excesivo. Tenía Usté que haberle dicho a la susodicha que le tocara los chkras del 1 al 3 y se dejara de warradas...
Me he reido muy agusto. Besetes (en el 4º chakra no, ¿eh?)
Cuanta soplapollez hay en el mundo... ser inmune a esas cosas solo es sintoma de estar cuerdo..
ResponderEliminarjajajjaa!! yo tb quiero!!! es la bomba!!
ResponderEliminarsi vienes ponte la bolsa de papel para reconocerte!!
besitos
Jjjajjaajaajajajajajajajaj!!!!! Genial!!!!! No puedo parar de reír!!!!
ResponderEliminarBuffffff, a mí tampoco me van nada los buenrollismos con olor a incienso, Budas rollizos y sonrientes, deidades de múltiples brazos, Brahmaputras, mantras, chakras, tantras, nirvanas y demás.
(Bueno, si soy sincera, el kamasutra sería lo único que me interesaría de todas esas doctrinas orientales).
Esa chica lo engañó descaradamente!! Es Ud ya muy mayor para que una niñata vestida de hippie se la cuele por la escuadra, por favor! No vuelva a permitir que le saquen el dinero con rollos de tantras, mantras y demás tontadas.
Saludos gatunos y ronroneos.
Siempre hay que probar las cosas. Así se aprende a distinguir qué es bueno y qué es malo.
ResponderEliminarYo también he hecho este tipo de terápias.Y es tal como tú lo has retratado...jiii!
ResponderEliminargeniaL
la cuestión es,
te has sentido mejor, o mas despejado o menos depre en los días que le sucedieron a la sesión, o ni eso?
saludos.
una gran y divertida historia como siempre señorito :)
ResponderEliminaralgun dia me encantaria conocerle :)
tienes q molar xD
Ya ni en las terapias alternativas encuentra usted comprensión??, madremía que desgracia!!! jajajaja.
ResponderEliminarBesoss
Creo que me apetece probar ... un gusto descubrirte, me quedaré por aquí. Muacc
ResponderEliminarPobrecito su micorpene... qué lastimita :)
ResponderEliminarMuchos besos de mi parte a su micropene
aisssss... Si por lo menos te hubieras relajado, habrías salido de allí dispuesto a pillar a la primera que pase. Además, diciendo que has aprendido eso del tantra se liga un montón. Fijo.
ResponderEliminarBesitos.
jajajajajajaja
ResponderEliminarSr. CG, no se imagina usted cuánto le agradezco las risas que me ha provocado. Se lo agradecería como a usted le gusta, pero aparte de vivir muy lejos de Barcelona, me gusta el incienso y el buenrollismo... así que es imposible.
La próxima vez que junte 60 euros para gastar, vaya a lo seguro
Un beso