Me dijo que sería delicado, que aseguró que iba a dolerme y cada una de estas amables palabras la acompañaba del apretón de un breve abrazo sobre mi hombro. Su voz sonaba cercana y agradable. Su aliento era cálido y olía a caramelos de menta. De esos que comías en el cine cuando eras un niño, de esos que saboreabas cuando todo era sencillo, cuando los problemas no existían. Quien me decía todo eso no era una mujer sino un hombre pero los géneros comienzan a difuminarse en uno solo cuando el cerebro emprende el camino por el sendero de la felicidad. Era un hombre quien me decía todo aquello. Era un hombre quien pretendía profanar mi cuerpo. Pero era un hombre de voz aterciopelada, un hombre amable, un hombre del que me hubiese enamorado de no ser yo obstinadamente heterosexual. La mayoría de ustedes están convencidos de saber lo que quieren, lo saben cuando entran en un bar, cuando se disponen a comprar un vino, cuando observan a las personas del genero contrario en la discoteca y deciden a quien invitar a un Gin-Tonic, a bailar o a lo que surja. Seguro que todos y cada uno de ustedes saben lo que hacer o que escoger. Yo creía que también lo sabía pero sucede que cuando alguien me sobrepasa con sus habilidades, comienzo a confundirlo todo. Y aquel hombre estaba a punto de hacerme romper mis mas férreas (y heterosexuales) convicciones.
-Solo será un poco, la punta -dijo sonriendo al tiempo que mostraba una maravillosa y blanca dentadura.
-Tengo miedo, nunca lo hice antes.
-Siempre hay una primera vez.
-Tengo miedo.
-Lo he hecho muchas veces, confía en mi.
-¿Qué sucederá después?
-Quizás tengas unas molestias pero pasará pronto.
-Tengo miedo.
-Vamos a ello, cuanto antes mejor.
Me agaché, relaje mis nalgas y permití que aquel hombre entrase dentro de mi. No puedo decir que fue lo mejor que me ha pasado pero tampoco fue lo peor. No me gustó pero tampoco lo rechacé. Cuando acabó me subí los pantalones y le miré a los ojos. Los míos estaban llorosos, los suyos no. Era todo un profesional.
-¿Te ha dolido? -preguntó amablemente.
-Un poco, sobre todo al principio.
-Es normal la primera vez.
-¿Volverás a hacerlo?
-Cuando sea necesario.
Al cabo de cinco minutos salí de la habitación, me temblaban las piernas y aun conservaba en mi nariz la penetrante colonia de mi proctologo. De repente me di cuenta que la revisión de próstata iba a ser solo una vez al año.Menos mal. O no... estoy confundido.
Ay, pobre. No sé si reir o abrazarte.
ResponderEliminarAunque bueno, piense una cosa. Ha estado un porrón de años ausente de preocupaciones. Nosotras, por más heterosexuales que seamos, no nos libramos desde bien jovencitas de que una vez al año, nos metan así en frío y a ingle abierta el "manubrio" del ecógrafo. Todo un poema.
Un besito grande. :*
Oiga, que yo nunca he fornicado con usted!!! Es que como ha dicho de meterse así en frío un manubrio... ¿se refería a mi?
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Jajajaja!!! Sí, lo veo confundidillo, que lo de que no le gustó pero tampoco lo rechazó se lee rara:) Fernando, por Dios, sea usted un hombre y la próxima vez apriete bien el trasero! Y que el proctoése tenga que sudar para hacerlo suyo! Hágase el difícil! (a mí siempre me da buen resultado con todo tipo de hombres; fijo que un proctoloquesea no es una excepción).
ResponderEliminarBesos!!!
Yo suelo apretar el trasero cuando un hombre se acerca por mi retaguardia. Es un instinto ancestral de preservación de mi hombría. Pero es que ese medico era ta atractivo...
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Pues a mi me encanta cuando mi ginecólogo "profundiza su trabajo " en mí , tan sólo fijo mis ojos en sus ojazos azules y me dejo llevar.. ;)
ResponderEliminar-si quiere se lo presto-
un abrazo.
Mejor présteme a la mujer de su ginecólogo.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Así, sin más, sin un "me gustas", sin un "cómo me pones", sin un "te quiero"?? Ni besitos en la despedida? Desde luego, ya no queda romanticismo en el mundo...
ResponderEliminarBueno, ya no puede usted decir que le quedan muchas zonas vírgenes...
Besos mil.
Sin nada de todo eso. La tecnología está acabando con el amor.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Que buena CMQ jajajajajaja es verdad, se están perdiendo las formas. Yo intenté invitar al cine a mi ginecólogo, pero rechazó la invitación. Luego lo intenté con el fisio, pero también. Se me acaban los campos de acción, no sé qué voy a hacer...
ResponderEliminar:D
EliminarQuerida Maripili. El problema no es a quien invita sino a donde. Inviteles a su lecho y verá que pronto aceptan se dediquen a la profesión que se dediquen.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Me has recordado este escrito.
ResponderEliminarSalud.
yo hasta el final pense que era un tatuaje!
ResponderEliminarDolio igual...
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Ya me hubiera gustado a mí que la revisión de próstata que me hice hace unos meses, hubiera tenido tanta carga literaria-sexual, no sé, será por el olor a hospital, o porque el del dedo no me inspiraba ninguna sensación especial;Yo salí corriendo y no paré hasta tomarme un chupito en el primer bar que encontré y olvidar esa humillante exploración.
ResponderEliminarEl alcohol, ese gran compañero que nos ayuda a olvidar penas y a relajar los esfínteres. Tomo nota, la próxima vez invitaré a mi proctologo a un chupito.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
No te preocupes....Una argumentación que intenta convencerte de lo que dudas, y de que nos "den", se va haciendo cada vez más normal y más politicamnete co-recto... es habituarse... ;)
ResponderEliminarbs
La diferencia es que si te da un político no lo hace con cariño...
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Me temo que eso que ocultabas en tu interior (o entre los michelines) va a acabar floreciendo, quizás debas volver antes de lo que crees.
ResponderEliminarBesos tiernos.
¿Me está llamando gordo maricón? Porque creo que acierta bastante.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Y yo que pensaba que le estaban haciendo una colonoscopia...;)
ResponderEliminarBesos.
yo ya tengo que ir pensando en hacermela.......¿algun consejo?
EliminarPídela con sedación... y nada. A pasarla. Lo peor es la noche anterior con el preparado que hay que tomar, y toda la noche en vela del baño a la cama y de la cama al baño... Después de 3, te vas acostumbrando xDDDDD
EliminarBesos.
Bienvenidos al foro de proctologia. Pasen y disfruten.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Tranquilo, a mí me hacen una colonoscopia cada año (no sé por qué se siguen empeñando en llamarla así cuando ya no tengo colon)y me lo paso bomba viendo por la pantalla el interior de mi intestino delgado.
ResponderEliminarSaludos y buen fin de semana.
Estimado Carlos Galeon. Su vicio no conoce límites.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Bueno hay cosas más extrañas, imagínate por ejemplo lo que debe sentir ese medico, que esta todos los días inspeccionando penes, el pobre, aunque sea hetero, ese si que no se los puede quitar de la cabeza...
ResponderEliminarEn todo caso no se los puede quitar de la punta de los dedos!
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Amor de hombre, estás haciéndome llorar de risa una vez máaas
ResponderEliminaray por favor no cambie nunca
Besos
Querida Cruela, siempre es mejor hacerla llorar de risa que de pena. Aunque preferiría hacerla llorar de placer. Para que engañarnos.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Sr. Gili. he visto su comentario en mi blog, siento haberlo dejado como novio de pueblo, vestido y alborotado!
ResponderEliminarHe tenido una semana muy movida. Por favor no deje que el cortejo lo mate, deje que lo haga yo.
un saludo
Sr. Gili, la portada de ese disco ha traido a mi mente gratos recuerdos de una niñez divertida emulando en casa a Mocedades, por lo cual ponerle música de Ayyy amor de hombre... e ir leyendo pues, nada usted déjese llevar al lado oscuro, lo bueno es que hasta le haya gustado, así el próximo año va súper tranquilo
ResponderEliminarPD: Mi mamá está enamorada de sus escritos, hoy toda la mañana hablando de usted... lo ha catalogado el mejor bloggero jijiji....
Besitos,
desde las alturas
Querida CaroNu. Dele recuerdos a su señora madre y dígale que el amor no conoce fronteras ni edad. :)
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Me parece que Ud.ahora con tantos frentes abiertos que tiene, no le da tiempo a contestar a todo el mundo. Ya sabe lo que dicen: quien mucho abarca, poco aprieta.
ResponderEliminarun saludo
Consejos doy que para mi no tengo.
Eliminarjajaj, eso que quiere decir, que no lo atiendo como debería? Déjese querer Sr Gili,déjese querer.
Eliminarun beso pero que no se mal acostumbre!
Ola!! tu blog está genial, me encantaria enlazarlo en mis sitios webs. Por mi parte te pediría un enlace hacia mis web y asi beneficiar ambos con mas visitas.
ResponderEliminarme respondes a emitacat@gmail.com
besosss
Emilia
Jajaja, qué delicados los hombres, os sentís "violados" cuando un doctor os hace un tacto rectal con un minúsculo dedo, ¿acaso sabéis qué introducen a las mujeres en sus revisiones ginecológicas?
ResponderEliminarQuerida aina. Cuando sea mujer y me realicen esos exámenes le contestaré.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
Usted,como siempre, cuanto menos, sorprendente...
ResponderEliminarante tal experiencia vital, poco tengo que añadir, sólo espero que el año se le haga largo...(o no...)
vuelva a deleitarnos pronto :)
Querida ani. Intentaré volverla a deleitar pronto. De la misma manera intentaré que el proctólogo no vuelva a deleitarme a mi.
EliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas